Presupuestos género sensibles en la gestión de la adaptación al cambio climático
Ene 13, 2021
Los presupuestos sensibles al género proporcionan los recursos necesarios para lograr resultados frente a la igualdad de género, esto es, mayor resiliencia climática con igualdad de género o mayores oportunidades económicas con actividades bajas en carbono. Un presupuesto que no considera actividades de género corre el riesgo de obtener resultados que perjudiquen a las mujeres (1).
Por ejemplo, un proyecto de adaptación al cambio climático en el sector agrícola que no incluya objetivos específicos para aumentar la capacidad de adaptación de las mujeres, con un presupuesto para consultas dirigidas a mujeres sobre los roles y responsabilidades agrícolas específicas que desempeñan en su contexto sociocultural, podría terminar financiando actividades que los hombres consideran más importantes (1).
El proceso de elaboración presupuestaria incluye la formulación, planeación, elaboración del presupuesto y evaluación del impacto de las intervenciones. Es necesario analizar en todas las fases de la distribución de recursos su impacto diferenciado sobre mujeres y hombres. En este proceso es importante tomar en cuenta que de acuerdo con los roles de género, las relaciones de poder y el uso, control y acceso a los recursos, las personas ocupan posiciones económicas y sociales distintas, por lo que es necesario establecer mecanismos de distribución e inclusión social que promuevan la igualdad (1).
“La identificación y definición de recursos materiales y humanos es fundamental para llevar a cabo las metas de género y evitar que todos los esfuerzos implementados corran el riesgo de quedar estancados y sin cumplir con los objetivos propuestos. El respaldo político se traduce no solo en la expresión de interés por avanzar en temas de género, sino, sobre todo, en el quehacer. Dado que para ello se requieren recursos, esta herramienta sirve de apoyo para definirlos” (2).
Las etapas de la presupuestación sensible al género se resumen en el siguiente diagrama:
Fuente: ODI / CDKN, 20201
La elaboración de presupuestos participativos es un mandato constitucional en Ecuador. Además, la Ley Orgánica de Participación Ciudadana, el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización, así como el Código Orgánico de Planificación y Finanzas Públicas establecen lineamientos y mecanismos para el desarrollo de presupuestos participativos en todos los niveles de gobierno, incluido el central, de acuerdo con sus competencias (1).
Adicionalmente, cuando se trata de proyectos de cambio climático con financiamiento internacional, existen requisitos de los fondos climáticos (GCF, GEF y otros) para que estos se elaboren mediante procesos participativos de consulta, en los cuales se recogen los intereses y necesidades de las poblaciones beneficiarias y las partes interesadas. Las salvaguardas sociales y ambientales constituyen mecanismos de los fondos mundiales para garantizar que los derechos de pueblos indígenas, comunidades campesinas, mujeres y jóvenes sean incorporados en el marco de objetivos y resultados de dichos proyectos, así como en sus presupuestos (1).
[1] Adaptado de Quinn (2009). Gender budgeting: practical implementation. Una guía paso a paso para la incorporación de la perspectiva de género con ilustraciones de estudios de casos. Útil para la comprensión integral de los fundamentos de la presupuestación y los procedimientos que tienen en cuenta el género.
[2] La “Caja de herramientas para fortalecer capacidades sobre género y cambio climático” se encuentra en proceso de desarrollo y publicación bajo el liderazgo del Ministerio de Ambiente y Agua con el apoyo técnico de la Fundación Futuro Latinoamericano (FFLA), CDKN y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).